LIBRO 1 – INVIERNO La acción comienza en el Polo Sur en invierno. Aquí es donde Katara y su hermano Sokka encuentran a un joven maestro del aire (Aang) y su gigantesco bisonte (Appa) dentro de un iceberg. Aunque Aang niega que es el Avatar, Katara no tarda en descubrir la verdad cuando un joven maestro del fuego llamado Príncipe Zuko ataca la Tribu de

l Agua del Sur en busca del maestro del aire. En su primer acto de heroísmo, Aang se entrega a Zuko a cambio de la seguridad de la tribu. Pero con ayuda de Katara, Sokka y su bisonte volador Appa, Aang escapa de la nave de

guerra de Zuko. Katara y Sokka deciden ayudar a Aang a llegar al Polo Norte para buscar a un gran maestro del agua que le pueda enseñar el dominio del agua, el primer paso para convertirse en un auténtico Avatar.

La búsqueda de un entrenador le lleva hasta el Espíritu del Mundo. Durante el solsticio de invierno, Aang entra en el Espíritu del Mundo y se pone en contacto con su encarnación anterior, el Avatar Roku. Roku le revela que un poderoso cometa va a pasar por encima de la Tierra al final del verano, y que el Señor del Fuego y sus tropas utilizarán su energía para ganar la guerra. Ahora Aang se enfrenta a una abrumadora tarea: no sólo tiene que aprender a dominar los cuatro elementos, sino que tiene que haberlo conseguido antes de que acabe el verano.

Su viaje al Norte alcanza un punto crítico cuando Katara y Sokka descubren el secreto de Aang: sintiéndose incapaz de cumplir su responsabilidad como Avatar, había huido del Templo del Aire y, como castigo por este acto irresponsable, había quedado encerrado en el hielo durante 100 años. Katara está furiosa con Aang; en su opinión si Aang no hubiese huido, la guerra nunca habría empezado y su madre seguiría viva. En un esfuerzo por demostrar a Katara que ahora sí se está tomando en serio sus responsabilidades como Avatar, Aang intenta utilizar sus poderes de dominio del fuego antes de estar preparado y quema accidentalmente las manos de Katara. Aang se siente culpable y jura no utilizar esos poderes nunca más.

Con Zuko a los talones, los chicos llegan por fin al Polo Norte y encuentran a un gran maestro del agua que enseñe a Aang. Pero como la Tribu del Agua del Norte es sexista, el gran maestro se niega a enseñar a Katara, y su sueño de toda la vida de convertirse en una maestra del agua se desvanece. Aang entrena incansablemente con el anciano gran maestro, quien le somete a una dura disciplina. Como parece que el entrenamiento no está sirviendo de nada, Aang y el gran maestro del agua se sienten tan frustrados que deciden abandonar las lecciones. El anciano considera que la falta de concentración de Aang hace que sea «imposible enseñarle». Cuando Katara se entera de que Aang ha dejado las clases, se enfrenta al entrenador y le exige que siga enseñando a Aang, porque el futuro del mundo depende de ello. Como el gran maestro del agua se niega, ella le desafía a una pelea, en la que demuestra sus aptitudes para el dominio del agua. Entonces el anciano no solo acepta volver a entrenar a Aang, sino también a ella.

El invierno culmina con un asalto de la Armada de Fuego a la Tribu del Agua del Norte. Al mando del castigo de Zuko, el comandante Zhao, la Armada de Fuego rodea el Polo Norte con docenas de naves, decidida a capturar al Avatar antes de que aprenda a dominar el agua. Tras una espectacular pelea en la que le perdona la vida a Zuko, Aang se une a la tribu para una batalla decisiva. Con la ayuda de Katara y el anciano gran maestro del agua, Aang crea un tornado de agua que empuja a muchas naves contra el hielo dejándolas inmovilizadas. El resto de las naves se retira. El heroísmo de Sokka, Katara y Aang ha salvado a la Tribu del Agua del Norte.

En el transcurso de la batalla el anciano gran maestro del agua ha sufrido heridas mortales. En su lecho de muerte le dice a Katara que ahora ella es la única que posee los conocimientos necesarios para completar el entrenamiento de Aang. Con la determinación que le ha dado esta experiencia, Aang se propone seguir su camino hasta el Reino de la Tierra para aprender a dominar este elemento. En lugar de regresar al Polo Sur para salvar a su tribu, Katara parte con Aang para enseñarle el dominio del agua, sabiendo que sin el Avatar ninguna nación sobrevivirá otro año. Sokka también decide continuar la misión, y jura que los protegerá con las dotes de guerrero que acaba de adquirir. Pero, ¿conseguirá Katara transformar al rebelde Aang en un Avatar suficientemente poderoso para detener la mayor fuerza destructora del mundo?